Múltiples estudios han mostrado que desde los 9 meses los bebés usan la raza para categorizar los rostros, mientras que a los 3 años los niños en Estados Unidos asocian a ciertos grupos raciales con características negativas.
Múltiples estudios han mostrado que desde los 9 meses los bebés usan la raza para categorizar los rostros, mientras que a los 3 años los niños en Estados Unidos asocian a ciertos grupos raciales con características negativas.